Un hábito saludable y efectivo, imprescindible en estos tiempos en los cuales todos los ambientes guardan algún grado de contaminación.
Los pulmones son uno de los cuatro sistemas de eliminación de toxinas más importantes que tenemos, junto con los riñones, el hígado y el intestino (y desde luego, también la piel).
Tradicionalmente, al momento de realizar una limpieza del organismo, quizás lo primero que pienses es en el sistema digestivo o los riñones; pero para las comunidades indígenas, es usual incluir al aparato respiratorio. Ellos mantienen limpios de flemas sus pulmones y también las fosas nasales ya que allí se alojan toxinas, virus y bacterias. Recurren a los baños o al vapor de agua para inhalaciones, ya sea sola o con diferentes plantas expectorantes. Es un hábito saludable y efectivo, más en estos tiempos en los cuales todos los ambientes guardan algún grado de contaminación.
¿Qué plantas saludables podrías emplear en los vapores? Entre otras, un puñadito (fresco o seco) en 1 litro de agua de: Llantén, Tomillo, Marrubio, Tilo, Ambay, Malva, Marcela y Anacahuita. Una vez al día, 15 minutos durante una semana ya te hará sentir un gran alivio. Yo lo repito varias veces al año (suelo emplear Malva sola). Puedes probar con cuál de ellas te sientes mejor y son más afines a ti. Puedes emplear agua sola, la cual es muy bienvenida también.
Es importante que en nuestra alimentación diaria nos alejemos de los lácteos, harinas, tabaco y azúcares y nos acerquemos a la Rosa mosqueta, Brócoli, Hibiscus, Cítricos, verduras de hoja verde, Avena, Germen de trigo, Semillas de zapallo, Almendras, Hinojo, Remolacha, Palta, Arándano.
Con la intuición y sabiduría del cuerpo, observemos lo que la tierra nos brinda en cada estación… seguro es lo que estamos necesitando en ese momento.
Importante: el consumo de hierbas medicinales es ante todo un tratamiento preventivo y, en segundo lugar, alivia un sinnúmero de malestares, pero de ningún modo deben reemplazar a los medicamentos y/o tratamientos indicados por el médico. Las plantas medicinales poseen precauciones, contraindicaciones y advertencias. Las propiedades aquí descritas son a modo informativo y sobre la base de personas sanas que no estén bajo tratamiento o tomando medicación alopática. Ante cualquier duda o inquietud, debes consultar a tu médico de cabecera.